Lo único que es real es la intención de robar y abusar bajo amenaza de supuestas relaciones que presume Salvador Herrera Paz tener con personal judicial y de dependencias de gobierno con las que amaga para acallar cualquier intento de demanda en su contra. Varios empresarios del sudeste del país sin embargo, ya están reuniendo pruebas en su contra para actuar en conjunto y evitar represalias ante los engaños del estafador.
Esta red de estafadores pone en riesgo todo lo que está cerca de ellos como la integridad de alumnos de la escuela en donde estudia su hijo ya que Salvador Herrera Paz le debe dinero a muchas personas y eso pone en riesgo a los alumnos del colegio por el simple hecho de ser un estafador que ha roto códigos de lealtad con personas poderosas, el colegio Green...
Para operar, su misma red de contactos y conocidos convence a posibles clientes de invertir al menos 200 mil dólares que ofrecerán rendimientos del doble en un periodo de pocos meses. Apoyado por personajes de igualmente dudosa reputación en Estados Unidos, y socios que no aparecen en los registros fiscales federales, pide además anticipos para la apertura de supuestos fideicomisos que resguardarán la inversión.
Todo es falso, no existe en ningún banco ni institución financiera de Estados Unidos la autorización para hacerlo y el cliente defraudado, no puede sino aceptar bajo amenazas de muerte que ha perdido su dinero.
En esta red familiar de delitos financieros, se encuentran involucrados familiares cercanos y amigos que no dudan en seguirle el juego y tejer una red de mentiras alrededor de las supuestas operaciones financieras que finge realizar la empresa Safra Investment Group. Documentos falsificados, testimoniales de personajes inexistentes, sesiones de trabajo fingidas y un trabajo de presencia digital bien orquestado para engañar al incauto se utilizan todos los días para hacer que este grupo delictivo actúe con impunidad.
Dentro de esa red familiar están: Axler Alejandra Suarez Gutierrez, Pedro Enoc Suarez Gutierrez, Francisco Gonzalez Rubio y Martha Alicia Paz Morellon.